Tres deseos y vamos a la calle
Tres monedas para el Cristo de Medinaceli, tres oraciones, tres deseos y la esperanza de conseguir algo. Aunque el plazo petitorio se abre el primer viernes de cada mes de marzo, la tradición no especifica su fecha de caducidad. Mientras, a Dios rogando y con el mazo dando en el “cuponazo” del viernes y en la lotería del sábado. No pude ir a la iglesia de Santiago, pero hice mis rezos a distancia con la esperanza de que me fueran convalidados. De momento he rezado por una Semana Santa brillante en la que todos comamos y dejemos comer. No saldremos -y llevo 48 años afiliado a una cofradía- ni con Rubalcaba ni con la Conferencia Episcopal; ni a quemar las calles, que para arder ya están las velas.
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