Rosa de Oro

IDEAL


Zaguan 25-10-09
Alfredo Ybarra
El obispo, Ramón del Hoyo, ha demostrado que sabe en silencio mover las piezas de todo tipo, dentro del orden de la Iglesia, para alcanzar las metas que se plantea; también que cuenta con buenas aldabas allí en el Vaticano, lo que dice mucho de él y de lo que deja entrever su humilde personalidad, tan recatada.
Como digo, sin grandes alharacas ha ido trabajando en pos de una de las referencias significativas de de la devoción en la diócesis: la Virgen de la Cabeza.
Lo más importante es la concesión por parte del Vaticano de este año jubilar en el que nos encontramos con motivo del centenario del nombramiento de la Morenita como patrona de Andújar, y al mismo tiempo centenario de la coronación canónica. A la par viene a celebrarse desde el pasado abril hasta la próxima romería el cincuentenario del nombramiento de la Virgen de la Cabeza como patrona de la diócesis.
Apoyado en la honda historia de esta devoción y de su universal romería, referenciada en el arte, en las crónicas históricas o de la Iglesia, o en obras literarias, todo ello rubricado por eximias firmas, que dan fe de una de las grandes devociones marianas del orbe creyente, el obispo solicitó la distinción de la Rosa de Oro para la Morenita al Santo Padre.

Condecoración que ha sido concedida, por vez primera en España, a una imagen de María. Todo ello se suma a la concesión perpetua que hizo el Papa, también a solicitud del obispo, de lograr indulgencias plenarias realizando en la peregrinación al Cabezo unas mínimas exigencias. Algo que también este obispo ha hecho en relación indirecta con Andújar fue solicitar al Vaticano, que Iliturgi fuese sede titular de diócesis, aún no existiendo físicamente; lo que reconoce a San Eufrasio, patrón de Andújar, de la diócesis y primer Obispo de Iliturgi, según la tradición. Mientras, nos encontramos a una Andújar que aún no ha dado la talla, dada la magnitud de los planos en que se mueve la devoción y romería de la Morenita.

Rosa de Oro, única de España, entre otras cosas, y en año jubilar, y se sigue mirando en corto y con demasiadas cuitas que trascienden por todas partes. Hasta el vicario del obispo, con palabras indirectas mencionó hace muy poco en el Santuario que no se debe seguir así ¿Qué nivel se tiene en actos, cultos y aconteceres sociales y culturales en un año cómo éste? El obispado, creo y es mi opinión tendría que dar el definitivo golpe de timón en un tema, que ya se dilata demasiado, y desvía bastante la atención general de lo esencial. Pero hoy, don Ramón, sinceramente, felicidades, por su menester de ejemplo y su mirada de amplio horizonte para la Iglesia de Jaén.